Un remanso de paz, la Kirkstall Abbey

miércoles, 7 de marzo de 2012

Enorme, ¿verdad? Aunque le falta alguna piedra...

Aprovechando un poco de buen tiempo, las ganas de hacer turismo por Leeds aumentan y llevaba tiempo queriendo visitar una de las atracciones turísticas más conocidas de por aquí, la Kirkstall Abbey.

Se trata de un antiguo monasterio de la Orden de Císter construido en el siglo XII (1152). Está ubicado en un parque público a la orilla del río Aire, a unos 5km. al noroeste del centro de la ciudad, 10 minutos en autobús (cogiendo el 33, el 33A o el 757).





Esta abadía se disolvió tras la "Supresión de los monasterios" en 1539 llevada a cabo por Enrique VIIIEn 1542 fue otorgada a Thomas Cranmer, arzobispo de Canterbury y defensor de la iglesia anglicana. Más tarde fue devuelta a la corona tras su ejecución. Sir Robert Savil (Sheriff de Lincolshire) compró la finca en 1584 y perteneció a su familia durante casi un siglo. En 1671 pasó a las manos de la familia Brudenell (condes de Cardigan). Durante esta época se reutilizó mucha de la piedra para otras construcciones de la zona, como el Puente de Leeds. En 1889 la abadía fue vendida al Coronel John North, que a su vez la ofreció como regalo al Leeds City Council.

Actualmente es más un lugar para pasear y descansar alejado del ruido de la ciudad. Después de una inversión de 5,5 millones de libras se reconstruyó parte del monasterio y a parte del reclamo turístico se utiliza para eventos públicos como el "Kirkstall Festival" y el "Kirkstall Fantasia open-air concert".


Tanto para los curiosos de la historia como para los que quieren hacer una pequeña escapada romántica, este lugar es muy recomendable. Destacan la tranquilidad que se respira el ambiente, los enormes árboles que rodean la abadía y los tulipanes que aportan ese punto de color al grisaceo paisaje al que Inglaterra nos tiene acostumbrados.

See you soon

0 comentarios:

Publicar un comentario